Conmemoración del XL aniversario de las elecciones del 15 de junio de 1977
Palacio de las Cortes. Madrid, 28.06.2017
Institucional
SS.MM. los Reyes .del XL aniversario de las elecciones del 15 de junio de 1977
Sus Majestades los Reyes presidieron la Sesión Solemne de las Cortes Generales que se celebró en el Palacio de las Cortes para conmemorar el 40º aniversario de las elecciones celebradas el 15 de junio de 1977, en las que se eligió el Congreso y el Senado de la Legislatura Constituyente.
Su Majestad el Rey durante su intervención
© Casa de S.M. el Rey
S u Majestad el Rey comenzó su intervención "recordando las palabras que S. M. el Rey Juan Carlos I pronunció en la apertura de la legislatura constituyente, el 22 de julio de 1977: La democracia —dijo entonces ante estas Cámaras— ha comenzado". "Ahora hemos de tratar de consolidarla", afirmó Don Felipe, para añadir a continuación "a él, junto a toda aquella generación que abrió el camino de nuestra democracia, quiero ofrecerles hoy y aquí el testimonio más profundo de nuestra gratitud, homenaje y admiración".
Don Felipe destacó que "conmemorar es recordar el acontecimiento que celebramos, pero también recordar sus causas; es, efectivamente, mostrar agradecimiento a sus protagonistas y valorar su obra; y es también ensalzar y actualizar los valores que el hecho conmemorado merece y representa", al tiempo que resaltó que "las elecciones del 15 de Junio de 1977 no pueden entenderse sin el largo periodo histórico que las precede".
Su Majestad continuó su intervención con un recuerdo a "la Constitución de 1812", de la que dijo que "ya supuso un referente esencial de la unidad, la soberanía y la libertad de los españoles" y subrayó lo "bien que hicimos en celebrar no hace tanto su Bicentenario". "Sin embargo", prosiguió Don Felipe, "desde entonces, España vivió bajo la vigencia de sucesivas Constituciones —o leyes con rango constitucional— que no fueron capaces de proporcionar y garantizar la estabilidad política, el progreso social y económico ni la convivencia en paz y libertad que los españoles anhelaban. Fue una época convulsa e incierta, en la que se sucedían los pronunciamientos y los golpes de estado, las guerras y la violencia. Se derribaba una y otra vez todo lo que antes se había construido".
Don Felipe tuvo un recuerdo para "el Congreso y el Senado surgidos de esas elecciones", en los que "se unieron varias generaciones de españoles, del interior y del exilio, con trayectorias vitales muy diferentes, con ideologías muy alejadas, pero todos ellos guiados e inspirados por un mismo espíritu", remarcó. Todo ello supuso que "nadie en España debía volver a ser enemigo de nadie; la exclusión y la imposición, la intolerancia y la discordia debían ser sustituidas por la renuncia al dogmatismo y la defensa de las propias convicciones con pleno respeto hacia el adversario y hacia las opiniones ajenas o diferentes". Fue desde ese momento, indicó Su Majestad el Rey, cuando "los españoles, como ciudadanos", comenzaron a "disfrutar de los derechos civiles, políticos y sociales propios de un régimen democrático, que garantizase la pluralidad y la alternancia política mediante elecciones libres y periódicas".
Su Majestad el Rey aprovechó la ocasión para "mostrar publicamente el mayor respeto, gratitud y admiración a quienes hicieron posible, con responsabilidad y sentido de Estado, este gran avance colectivo. Porque si hoy la democracia y la libertad son una evidencia, se lo debemos a ellos. Porque entonces, hay que recordarlo, no lo eran". Don Felipe señaló que "los parlamentarios del 15 de Junio no estuvieron solos", contaron con la compañía de "los líderes intelectuales, culturales, empresariales y sociales de la España de aquel tiempo, en el que también los Medios de Comunicación desempeñaron una función muy relevante y necesaria. España entera se movilizó, unida y con el voto de sus ciudadanos, a favor de la libertad en paz, la convivencia y la democracia", continuó.
Don Felipe quiso rendir homenaje también al verdadero protagonista de esos años, "el pueblo español", del que dijo que "lo fue con su participación y voto en el referéndum para la aprobación de la Ley para la Reforma política; lo fue con su participación en las Elecciones del 15 de Junio; y lo fue en el Referéndum de 6 de diciembre de 1978 por el que se aprobó la Constitución". Como consecuencia de estas tres decisiones "el pueblo español decidió, sin reservas, caminar unido en una misma dirección" [...] y "devolvió a España la confianza en sí misma, la autoestima y el orgullo de ser, en primer lugar, un ejemplo para nosotros mismos y en segundo lugar, una referencia para las democracias en todo el mundo". Desde entonces, Su Majestad el Rey manifestó que España, "es un país respetado, apreciado y por qué no decirlo, querido", haciendo especial hincapié en que todos estos logros se han alcanzado en "un marco de libertad, solamente quebrantada durante años por aquel terrorismo felizmente derrotado con toda la fuerza de la sociedad española, con el peso de nuestro Estado de Derecho y con la cooperación internacional".
Su Majestad el Rey hizo especial énfasis en que "ningún camino que se emprenda en nuestra democracia puede -ni debe- conducir a la ruptura de la convivencia, al desconocimiento de los derechos democráticos de todos los españoles o a la negación de los valores esenciales de la Europa a la que pertenecemos" y se reafirmó en que "menos aún, en un camino que divida a los españoles o quiebre el espíritu fraternal que nos une".
A su llegada, Su Majestad el Rey recibe el saludo del presidente del Gobierno, Mariano Rajoy Su Majestad el Rey recibe el saludo de la presidenta del Congreso de los Diputados, Ana María Pastor Fotografía de grupo con los diputados y senadores de la Cortes Constituyentes Sus Majestades los Reyes junto a la placa conmemorativa del XL Aniversario de las elecciones generales del 15 de junio de 1977 Sus Majestades los Reyes en el hemiciclo durante la interpretación del Himno Nacional Tribuna presidencial durante la intervención de la presidenta del Congreso de los Diputados Su Majestad el Rey durante su intervención Su Majestad el Rey durante su intervención Sus Majestades los Reyes acompañados por los presidentes de los Poderes del Estado en la inauguración de la exposición conmemorativa sobre las eleccio Sus Majestades los Reyes durante el recorrido a la exposición con explicaciones a cargo de la presidenta del Congreso de los Diputados
Don Felipe destacó que "la convivencia tiene su mayor garantía y su mejor protección en las normas que la amparan. Porque el respeto a esas normas, en democracia, no es una amenaza o una advertencia para los ciudadanos, sino una defensa de sus derechos", y recordó que "dentro de la ley es donde cobran vigencia los principios democráticos, donde se deben encauzar los antagonismos y resolver los desacuerdos y las diferencias mediante el diálogo, mediante el debate", y ha insistido en que "fuera de la ley", como "nos enseña la historia, solo hay arbitrariedad, imposición, inseguridad y, en último extremo, la negación misma de la libertad".
Su Majestad el Rey finalizó su intervención con una referencia personal, "El 15 de Junio de 1977 yo tenía solo nueve años. Como muchos otros niños y jóvenes de nuestro país, como muchas de sus señorías también, no teníamos conciencia plena y cabal de lo que sucedía en España" y advirtió que, en esas fechas "percibíamos la intensidad del momento e intuíamos sentimientos diferentes, a veces encontrados: por una parte, inquietud, preocupación por el futuro, miedo al fracaso; por otra, coraje y valentía; y por encima de todo, mucha ilusión, una gran emoción y muchísima esperanza". Todos estos acontecimientos culminaron "nueve años más tarde, alcanzada la mayoría de edad", con el juramento de la Constitución por Don Felipe.
Para concluir, Su Majestad el Rey garantizó que "con esas mismas actitudes, con esos mismos sentimientos, 40 años después, la Corona reafirma aquí, ante los legítimos representantes de la soberanía nacional, su compromiso irrevocable con la democracia, con el entendimiento entre todos los españoles y con su convivencia en libertad".
Sus Majestades los Reyes estuvieron acompañados por el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy; la presidenta del Congreso de los Diputados, Ana María Pastor; el presidente del Senado, Pío García-Escudero; el presidente del Tribunal Constitucional, Juan José González Rivas; y por el presidente del Tribunal Supremo y del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), Carlos Lesmes, entre otras autoridades.
Seguidamente, Don Felipe y Doña Letizia recibieron el saludo de las Mesas del Congreso y del Senado para dirigirse a continuación a la Puerta de los Leones y acceder al Congreso de los Diputados al Vestíbulo de la Reina. Allí, les estaban esperando los vicepresidentes primero y segundo de la Asociación de exparlamentarios de las Cortes Generales, Manuel Núñez Encabo y Eugenio Nasarre, respectivamente.
A continuación, Sus Majestades los Reyes se trasladaron al salón de Pasos Perdidos y saludaron a los miembros del Gobierno asistentes, presidentes autonómicos, expresidentes del Gobierno: Felipe González, José María Aznar y José Luis Rodríguez Zapatero, jefe de la oposición y secretario general del Partido Socialista Obrero Español, Pedro Sánchez y, por último; a la junta de portavoces del Congreso y del Senado.
Tras la ceremonia de entrega de insignias conmemorativas a los diputados y senadores de las Cortes Constituyentes, Don Felipe y Doña Letizia accedieron al hemiciclo donde, tras la interpretación del Himno Nacional, la presidenta del Congreso declaró abierta la sesión.
Al término de la misma, Sus Majestades inauguraron la exposición "40 años de las primeras elecciones democráticas".
Con estos actos se dio comienzo a una serie de conmemoraciones que se prolongarán durante más de un año y que culminarán el 6 de diciembre de 2018, cuando se cumplirán 40 años de la aprobación en referéndum de la Constitución de 1978.