La gran belleza, esplendor, esfuerzo de los costaleros, se manifiesta en este pasaje del Santo Encuentro.
Es seguido por miles personas que respetuosamente asisten en silencio a su ejecución.
Eso si, con la culminación de encuentro se arrancan con un espectacular y atronador aplauso que asiste de energía a los cofrades en su constante procesionario.