martes, 6 de junio de 2017

“Batallas del abuelo” Ejercer los derechos

“Batallas del abuelo”  Ejercer los derechos. 

El “guelu” hoy está muy reflexivo. Los cariñosos saludos se alargan mínimamente, pero se nota. La chavalería hoy es numerosa. A decir verdad, varios de los asistentes, ya no eran alumnos de la escuela. Estaban cursando sus estudios de secundaria, ―en aquellos años, Bachiller Elemental―, en colegios de Vetusta o de Mieres. 

La expectación la había generado  la promesa de «Falcatrues». Su promesa de venir a contarnos como era su trabajo en la SEAT, y qué diferencias se encontraban en cada modelo, el D y el E, Pero nuestro antiguo compañero, no pudo venir. Esta ausencia hizo que nos quedáramos apáticos, ya que en la década de los sesenta un simple cambio en los intermitentes, tenia para nuestra imaginación connotaciones decisivas.



 Ⳑ a no comparecencia, también afectó a Lin. No tuvo en cuenta la posibilidad de que no pudiera veir y no reflexionó sobre algún peripecia de su vida, que pudiera compartir con nosotros, y que compitiera en interés con el 600.
En medio del desencanto, los mayores, comenzaron a mostrar su intención de marchar.
Pero Lin, en una arrancada con brío, les corrige ”Eeeh! ¿desde cuando los marineros desembarcaron, sin permiso del patrón? Eso, no es lo que practicamos en estas charlas ¿Verdad?
Con prontitud volvieron a sentarse pidiendo disculpas. 

Lin, había cogido el hilo. 

―Cuando alguien accede unos conocimientos y no los aplica a su vida, ha perdido el tiempo. Y lo voy a ajustar más. Sí quienes imparten estos conocimientos, están tutelados por el estado, la iglesia o cualquier organización que tenga fines previamente decididos, entiendo que la puesta en valor de tu propia identidad te lleve a una situación de desobediencia. Eso es justicia, es libertad, es democracia. Ahora con Lin no pasa eso ¿Verdad?.
―¿Tengo parecido con el cura?  Carcajadas
―¿Con el falangista? Carcajadas
―¿Con la maestra? Bueno ella es más parecida a mi. La carcajada ya fue de trino de tordos. mezclados con la voz de alguno que le dijo. “No me había fijado, pero por delante tienes la misma figura”.
Esto que os acabo de contar, sabéis…. 
ya,ya, “guelu” de aquí no sale nada de

nadie, encima con lo que nos reímos.

Comienzo

Un ser humano, no llega a ser persona, si no vive en libertad, igualdad, está obligado a respetar y que le respeten, tener identidad propia, asumir el compromiso con todo lo que la naturaleza nos regaló, y tener como centro de vida al amor. El amor es fundamental para llegar objetivos de felicidad. El amor comienza por amarse a uno mismo, amar a todo lo demás, saber perdonar, y saber dejarse amar.
Estas cosillas tan poco importantes…, y sencillitas…, ¿quien creéis que nos las debe facilitar? 
El gobierno, la iglesia, Franco, la guardia civil, ...se atropellaron las respuestas.
No. Silencio, Murmullos
No. Murmullos, y pregunta,
Entonces ¿quién?.
Pues es la decisión individual de cada uno. Todo ello lo decide cada persona. Si decido vivir en libertad, ejerceré mi derecho. Igualdad, lo mismo, y así con todos.
Pero “guelu”, la guardia civil, la policía, los falangistas, … van a por ti.
Puede ser. Pero sabes una cosa mi rey. Son duros con los débiles. Con los que plantamos cara..., muchos han caído, cierto, pero la mayoría seguimos aquí conquistando cuotas de libertad.

Recuerdo del día del alcalde

Cuando elegimos a nuestro alcalde pedáneo(de barrio, en ciudad) se presentó en la junta el alcalde del concejo con un camión de guardias, y con él, a la cabeza intentaron entrar a la antojana de Juan, para disolver la reunión ilegal (+ de 5). Nos levantamos al unisono,"la decisión de que a nuestro representante lo nombrábamos nosotros o nadie" hizo que el lechuguino reculara, mandara retirada y celebró una reunión con toda la vecindad.

Un día hablamos de los casos que dieron lugar a alguna que otra leyenda, que bien conocen vuestros padres.

A ver, si alguien trae algo que le cuente su familia. Será bonito,